domingo, 25 de diciembre de 2011

Que no ver en Navidad: Detrás de las Paredes de Jim Sheridan





Soy amante de las películas de terror: lo he comentado hasta el cansancio, en este, su blog de confianza. Por supuesto, que la oferta últimamente se ha hecho reducida y la mayor parte de las veces, insatisfactoria. El gran cine ha optado por la opción de repetir una y otra vez viejos clichés con mayor o menor acierto, o en el mejor de los casos, versionar clásicos que en mi opinión, no aceptan revisiones. Cual sea el caso, el cine de terror se ha convertido en una mezcla irrisoria de géneros y en algunos casos, de pequeños guiños argumentales sin contundencia. Y " Entre Paredes" del director Jim Sheridan, quien algunos de mis lectores recordarán del gran drama "Brothers" , es una de ellas. Lamentablemente, su intento con el género del terror no ha sido tan afortunado y lo que encontramos en el film no es más que una torpeza visual y de pulso narrativo alarmante.

De una vuelta de tuerca a la nada.

Con un reparto solvente ( Los sólidos Daniel Craig  y Rachel Weisz en los papeles principales ) la película tiene un punto de partida que podría resultar intrigante, a pesar de ser una historia que el fanático del cine de terror y el que no lo es tanto, lo ha visto en numerosas ocasiones: una familia modélica decide abandonar la ciudad y comprar una casa hermosa pero con una siniestra historia en mitad del campo. Hasta este punto, Sheridan consigue dotar de cierto ambiente a la trama y no obstante que la narración avanza a trompicones y  sin demasiados alicientes, tiene ese toque de contenida tensión que podría sostener una historia como esta. No obstante y tal vez debido a las diferentes re escrituras que el Guión sufrió durante la pre producción ( y las posteriores modificaciones en edición que solicitó la productora una vez filmada ) una vez superada la presentación de los personajes y la circunstancia en que viven, la película se desmorona de inmediato en un caos argumental carente de cualquier lógica.

Arcos argumentales sin resolverse, anuncios de tramas que terminan siendo simples giros narrativos sin sentido, un fragmentado discurso visual, personajes mal esbozados, hacen que la película comience a precipitarse en el absurdo: no solo carece de lógica la mayor parte de la estructuración de la Trama ( sobre todo cuando se le compara con historias similares como Shuter Island y  The Ward ) sino que además, la historia en general carece de una único planteamiento comprensible: a medida que la película avanza, el esforzado espectador debe intentar cohesionar los trozos de información que el guión sugiere con irritante torpeza. Los personajes, vacíos y blandos, avanzan en medio de una narración parca, incomprensible, hasta llegar a un final precipitado, forzado y tan completamente caótico como el resto de la trama. Y mientras tanto, los actores, quienes presumiblemente debieron replantear una y una vez sus personajes a pedido del Guión reescrito ( leí que la trama se transformó por completo en su última edición y se tuvo que filmar nuevas escenas ) parecen confundidos, tropezándose con sus propias recreaciones de la trama y probablemente con la necesidad del director de mantener cierto orden secuencial que nunca se logra. Cuando el film acaba, se tiene la sensación que se vio unas tres películas en una. Y probablemente sea el mayor problema de este trama sin mayor sustancia: el hecho que nunca termina de definirse por una historia, y la trama naufraga aparatosamente en el caos.

Como dije, el género del terror sufre un preocupante declive, probablemente fruto de la incapacidad de los directores para comprender el genero como una forma de creación abstracta, más que una mera narración destinada a provocar sobresaltos. Una lastima, teniendo en cuenta las ilimitadas posibilidades que el miedo - como concepto y creación - puede brindar al cine actual.


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